Cómo organizar las comidas en una cena sorpresa

Si alguna vez habéis intentado organizar una cena sorpresa, ya sabéis que no es tarea fácil. Más allá de tener que pedir a todos los invitados que guarden secreto, es necesario dejar la decoración de la sala para la última, esconder compras que se vayan a destinar a la fiesta e intentar no dar a entender que estamos preparando un menú. ¿Pero cómo es posible esconder todo esto durante días?

Mi sugerencia es organizar la fiesta en un sitio privado - o sea, alquilar un espacio o reservar una sala para el efecto. Así, podréis llevar toda la decoración a la sala y los invitados pueden esperar cómodamente hasta que la persona que va a ser sorprendida llegue. El sitio elegido puede ser un café o restaurante donde suelen comer, para que el invitado no sospeche nada antes de llegar.

Otro tema es contratar un servicio de catering especializado. Organizar comidas sorpresa en casa supone dejar las compras de supermercado hasta el último momento, improvisar cuando algún ingrediente está agotado, cocinar con prisas y, probablemente, descubrir que los 4 discos de la cocina no son suficientes para preparar todo. Por lo tanto, una de dos: o mantenemos el secreto, o la comida sorpresa será una mezcla de crudos y quemados, sin nada en su punto.

Hoy en día hay diversas empresas de catering que llevan un chef hasta tu casa o que entregan la comida ya preparada para servir a los invitados. Aparte de la ventaja de tachar este punto de la lista de preocupaciones, las empresas de catering también están preparadas para responder a pedidos especiales sin gluten, sin azúcar añadido o sin lactosa, por ejemplo.

Por todos estos motivos, ¡creo que hacer una reserva en su restaurante favorito o contratar una empresa de catering son una receta contra el desastre de organizar comidas sorpresa en casa!